Zeiss Vision Care, Aalen, Alemania
La mejor perspectiva en cada situación: ZEISS lleva la funcionalidad y la calidad de las lentes a nuevas alturas con sus innovaciones. Con su unidad de revestimiento, Bühler forma parte de este desarrollo exclusivo. ¿Cómo continuará la historia de éxito?
213.08.2019
Victoria Beckham apuesta por ellas y la atleta española Ruth Beitia las utilizó en Rio 2016 para hacer su salto en alto olímpico: gafas con lentes de ZEISS. Si existe una marca global de óptica que garantice la mejor perspectiva, tiene que ser el fabricante alemán ZEISS. Como Rolex es para los relojes, Rolls Royce para los coches, Apple para los teléfonos y Chanel para los perfumes, ZEISS es la marca por excelencia para las lentes.
Y por un buen motivo. La historia de la empresa está repleta de innovaciones punteras hasta la fecha: ya en el siglo XIX, ZEISS desarrolló los primeros modelos físicos para el cálculo óptico de microscopios. En 1912, la empresa inventó la lente de gafas Punktal, que fue la primera lente para gafas moderna de alta precisión. En el año 1959 se creó el revestimiento antirreflejos. En 1986, ZEISS fabricó la primera lente progresiva con simetría horizontal fácil de llevar. ZEISS ha estado digitalizando la óptica desde 1992, empezando por un sistema basado en vídeo para realizar mediciones individuales a fin de garantizar que las lentes encajasen a la perfección. En 2013, ZEISS lanzó DuraVision Platinum, el vidrio más resistente a los arañazos del mercado a la fecha. ZEISS también revolucionó la producción de lentes específicas para el cliente, por lo que actualmente las lentes solo tienen que procesarse en un lado. Muchos fabricantes de gafas en todo el mundo han adquirido una licencia para poder utilizar esta tecnología. Cada año, ZEISS invierte el 10 % de sus ingresos en I+D, lo cual se refleja en el rápido ritmo de innovación de lentes e instrumentos ópticos.
Cuanto mejor entendamos lo que ocurre en el cerebro, mejor podremos construir gafas.
MARKUS HAIDL, Investigador de ZEISS
ZEISS desempeña un papel muy importante en la historia de éxito de las gafas. Cada año, vende 100 millones de lentes para gafas en más de 60 países de todo el mundo. Existen revestimientos y diseños especiales para conductores de coches, personas que trabajan con ordenadores y atletas, lentes personalizadas y optimizadas para los ojos, el rostro, la montura y el estilo de vida, todo con el sello de calidad ZEISS.
Desde entonces, las gafas han pasado de ser una ayuda visual con prescripción médica a un artículo de moda producido a escala industrial, un objeto diario que se apoya en su nariz y hace mucho más que simplemente corregir su visión.
Por supuesto, esto hace que nos olvidemos de lo importante que es tener una buena visión. “Ver para creer”: así lo resume Markus Haidl, investigador de ZEISS. La educación, la calidad de vida y el confort no pueden conseguirse sin una visión clara. La vista se considera el sentido más importante de los seres humanos. Se estima que recibimos el 80 % de toda la información a través de nuestros ojos.
Con una visión deteriorada, resulta difícil aprender, la vida laboral se acorta drásticamente y la calidad de vida se reduce.
Como ocurre en otras áreas de las necesidades básicas humanas, cuando se trata de la visión, sigue habiendo muchas personas que no tienen acceso a ayudas ópticas, lo cual se estima en 625 millones de personas en todo el mundo.
A menudo, se subestima la naturaleza de alta tecnología de las gafas. A primera vista, una lente de plástico parece ser un trozo de plástico transparente. Pero las lentes ZEISS representan una revolución en tres diferentes aspectos:
Con ZEISS i.Profiler, el óptico puede capturar los defectos del ojo con extrema precisión, aplicando 1500 puntos de medición por ojo. Un algoritmo especial, conocido como la fórmula de la Coca-Cola de los fabricantes de lentes para gafas, calcula la mejor corrección posible para su visión. Usando esto como base junto con sus requisitos visuales personales, se generan los parámetros de producción relevantes para la lente en la máquina de procesamiento en uno de los lugares de producción de América, Europa o Asia. El resultado es una verdadera lente personalizada, hecha a medida, tan única como una huella dactilar. El efecto es impresionante. "El desempeño visual en condiciones de poca luz y durante la noche mejora considerablemente. Como resultado, los motoristas tienen más seguridad en las carreteras. Los colores se ven mucho más intensos, todas las impresiones visuales aparecen más nítidas y con mayor contraste", explica Haidl, investigador de ZEISS.
ZEISS fabrica hasta 15 000 unidades de este producto personalizado cada día en su centro de producción bajo prescripción de Aalen, Alemania, y el proceso de conformación se realiza individualmente para cada lente, en lugar de hacerse en lotes. La producción y la logística se ejecutan con la misma precisión que el funcionamiento interno de un reloj suizo. Empezando desde cero, la lente se conforma por completo de manera automática en 90 segundos mediante una máquina procesadora CNC (control numérico por ordenador) de cinco ejes y se ajusta ópticamente para su futuro usuario. El proceso de producción, desde el cálculo de la lente individual hasta el formado, pulido, tintado y revestimiento, incluye en total más de 30 fases individuales.
"Aquí es donde ocurre la magia, dado que es donde nos desmarcamos de la competencia", explica Haidl. Las funciones básicas, como la resistencia a los arañazos o el antirreflejo, han formado parte desde hace tiempo de las características estándar de los fabricantes de gafas; pero actualmente existe una tendencia hacia las gafas desarrolladas para ofrecer el más alto nivel de confort y seguridad en cualquier situación. Para los motoristas, por ejemplo, los desarrolladores de ZEISS han creado lentes especiales para gafas que filtran parte de la luz azul de alta energía de los faros LED modernos. Esta parte de la luz hace que las luces modernas sean muy brillantes, lo que resulta adecuado para los conductores pero irritante para otras personas, como los conductores en tráfico de sentido contrario. La reducción proporcionada por el revestimiento ZEISS DriveSafe reduce los destellos y hace que la conducción sea más agradable por la noche o en condiciones de poca visibilidad.
Uso de pantallas: las pantallas de retina de alta resolución en tabletas y teléfonos inteligentes, por ejemplo, envían ondas de luz que indican a nuestro cerebro que es de día. Esto afecta a la distribución de la melatonina de la hormona del sueño. Las lentes ZEISS también pueden mitigar los efectos de estas particulares longitudes de onda. En cuanto a lentes de contacto, por ejemplo, con EnergizeMe, ZEISS ha desarrollado lentes específicas para usuarios de lentes de contacto. Los usuarios de lentes de contacto también pueden llevar gafas durante varias horas al día para descansar la vista. Dado el uso intensivo de dispositivos digitales, que emiten una alta proporción de luz azul, y los hábitos particulares de visión de los usuarios de lentes de contacto, ZEISS ofrece a este grupo objetivo un producto que se ha optimizado para sus especiales requisitos de visión y su estilo de vida digital.
Tenemos que asegurarnos de que los resultados que hemos logrado con los prototipos se puedan reproducir de forma fiable en la producción en masa.
KARL MATL, Especialista de revestimientos de Bühler
Esto nos lleva al tema de los revestimientos: "Utilizamos revestimientos para dar a las lentes sus funciones especiales", explica Haidl. Esto significa que el revestimiento es una fase crucial del proceso de producción de las lentes, y también una de las áreas de aplicación de Bühler. Después de un baño de inmersión para conseguir un revestimiento resistente a los arañazos, las lentes para gafas pulidas se colocan en una cámara de vacío, donde se depositan por evaporación las capas para otras funciones.
En pasos independientes, se aplican hasta nueve capas individuales de seis materiales diferentes. Los óxidos metálicos se evaporan en alto vacío y se depositan en la superficie de las lentes, que se ioniza y, por tanto, atrae a las moléculas de óxido con carga opuesta. Para conseguir capas extremadamente duras y resistentes, las capas de revestimiento se comprimen adicionalmente usando radiación ionizante. Al final del proceso, todas las capas juntas alcanzan un espesor de tan solo 400 nanómetros. Es una característica de alta tecnología: se trata de la distancia que crece el césped en 15 segundos.
"Si tenemos en cuenta estas dimensiones con las que tenemos que producir nuestros componentes de forma precisa y fiable, el resto resulta bastante trivial", explica Karl Matl, especialista en revestimientos de Bühler. En caso de un posible error en la producción automatizada, el proceso de producción de una lente individual se debe reiniciar desde cero. Si se debe volver a producir la lente, la entrega al cliente se atrasaría, especialmente si el error ocurre en la fase de revestimiento al final del proceso. Con varios miles de pedidos al día en Aalen, lograr una producción exenta de errores es un verdadero desafío.
Con los sistemas de revestimiento SYRUS, Bühler Leybold Optics ha casi dominado el arte de revestir a la perfección. Es fundamental que la unidad de alto rendimiento no falle: tiene que ofrecer los mismos resultados de revestimiento de forma fiable las 24 horas del día y esto es lo que hace que la calidad de las lentes ZEISS sea única. El color azul del reflejo de las gafas ZEISS requiere una precisión nanométrica en el espesor del revestimiento, formado apenas por unas pocas capas de átomos una encima de la otra.
Durante más de 10 años, ZEISS ha estado tan satisfecho que Bühler es uno de sus proveedores preferidos y el sistema SYRUS se utiliza en todos los centros de producción del fabricante de lentes para gafas. "Para nosotros, Bühler no es un mero proveedor, sino un verdadero socio", afirma Haidl. Después de todo, no son solo las tecnologías y las máquinas, sino en última instancia las personas quienes finalmente garantizan que los trabajos de I+D permitan fabricar lentes a través de un proceso industrial eficiente. "Y, para ello, creemos que Bühler es un socio de confianza que demuestra tener mucha iniciativa", explica Haidl.
La confianza por ambas partes también desempeña un papel importante. "Tenemos que asegurarnos de que los resultados que hemos conseguido con los prototipos puedan reproducirse de forma fiable en la producción en masa", dice Matl. Esto requiere una estrecha coordinación entre ZEISS y Bühler, especialmente en situaciones particulares. Para la transferencia de un revestimiento funcional de reciente desarrollo, como ZEISS DriveSafe, también es necesario desarrollar nuevas tecnologías y nuevos estándares de revestimiento. Todo ello forma parte del proceso de innovación que debemos dominar juntos.
Trabajamos juntos para poder controlar y adaptar el proceso de revestimiento de manera más efectiva.
MARKUS HAIDL, Investigador de ZEISS
Después de más de 170 años de ZEISS y más de 100 años de lentes de precisión, alguien se podría preguntar: ¿el caso de éxito de las gafas se acerca lentamente a su final? ¿Se han agotado los desarrollos para esta pieza de plástico transparente? Esta pregunta hace sonreír a Haidl, investigador de ZEISS, y a Matl, experto de Bühler. Todo se reduce al hecho de que la visión en sí misma no se ha comprendido del todo. Las investigaciones actuales sobre el cerebro nos permiten conocer cada vez con mayor profundidad cómo los humanos formamos una imagen subjetiva y emocional basada en datos físicamente objetivos de las ondas de luz. "Cuanto mejor entendemos lo que ocurre en el cerebro, mejor podremos construir gafas", explica Haidl, investigador de ZEISS. En ZEISS Vision Science Lab en Tübingen, los investigadores trabajan en estas cuestiones fundamentales en estrecha cooperación interdisciplinaria con universidades y centros de investigación no universitarios.
Todavía existe potencial para una mayor optimización de la producción. "Trabajamos juntos para poder controlar y adaptar el proceso de revestimiento de una forma más efectiva", explica Haidl. Si eso funciona, podremos trabajar de forma más precisa y eliminar el origen de los errores con mayor facilidad. Bühler está desarrollando actualmente un sistema de medición aún más preciso de las capas de espesor nanométrico a fin de alcanzar una mayor precisión del límite de espesor de la capa. Y en términos de funcionalidad, todavía tienen que descifrarse otros enigmas, como impedir que las lentes se empañen, lo cual está primero en la lista. Si se lanzaran al mercado unas gafas antiempañamiento, no solo serían apreciadas por los atletas de deportes invernales y los grandes chefs. Todos los fabricantes de gafas de renombre están trabajando en ello y no sería de extrañar que ZEISS, en estrecha cooperación con Bühler, fuese el primero en definir un nuevo estándar.
+41 71 955 11 11
media.relations@buhlergroup.com
Gupfenstrasse 5
Uzwil
9240
Suiza
