Es importante estar 100 % seguro de los ingredientes. La recepción de harina puede incluir un tamiz grueso, uno en el tubo de presión y uno de control acoplado para eliminar partículas gruesas y cuerpos extraños. El principio "primero en entrar, primero en salir" de la descarga de silos brinda la mayor seguridad alimentaria.
La precisión es la base para controlar las recetas. Nuestros sistemas de pesaje y dosificación ofrecen parámetros precisos de pesaje y dosificación, así como un transporte higiénico de cada producto. El diseño compacto le ofrece alto rendimiento y estrictas normas de higiene adaptados a sus necesidades.
La mezcla es un proceso clave para los productos de panificación. La solución de mezcla correcta produce masas líquidas homogéneas en el menor tiempo posible.
El corazón del proceso es un horno que convierte la materia prima en crujientes hojas de oblea. La masa líquida se deposita sobre placas de cocción que se cierran antes de atravesar el horno. Tras una vuelta, las hojas de oblea horneadas se pueden retirar y seguir procesando para transformarlas en delicioso pan crujiente.
Las hojas de oblea se enfrían a temperatura ambiente con un refrigerador en arco.
Este paso determina si el pan crujiente será dulce o salado. Para obtener un sabor dulce, las hojas de oblea se rocían con ingredientes dulces y se caramelizan. Para obtener pan crujiente salado, se rocían las obleas con ingredientes salados y después se tratan para eliminar el exceso de humedad y fijar los ingredientes a las obleas.
Enfríe las hojas de oblea decoradas a fin de prepararlas para un procesado posterior.
Las hojas de oblea decoradas se transforman a continuación en panecillos crujientes individuales mediante el proceso de corte.
Por último, los panecillos crujientes se transfieren con máquinas de extracción para seguir procesándose, por ejemplo, para su embalaje.